martes, 10 de mayo de 2016
Recuerdos
Yo me alejaba de ti, cruzaba los dedos para que se cumpliera nuestra promesa. Tú te despedías para siempre, no me lo dijiste, pero tu mirada no me dio ninguna certeza.
Ya puedo decir que he superado el dolor, pero no el amor, decidí amarte y decirte adiós para siempre, porque no es justo para ninguno de los dos; tú no mereces mi dolor, ni mis esperanzas, y yo no quiero sufrir más.
Sí, te digo adiós, y aunque hay días en que tu recuerdo camina de mi mano, he aprendido a conversar con tu ausencia, a dedicarte canciones que no escucharás, a escribirte cartas que no leerás.
Ya no me dueles, volví a ser yo, volví a creer en mí y eso solo lo logré alejándome de la ilusión de verte volver.
Me fui y te fuiste, vacías quedaron las bancas que fueron testigos de una promesa rota.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario